Los Citizens volvieron a la senda del triunfo luego de varios días complicados.
Tras quedar con un jugador más desde los primeros minutos, los hombres de Manuel Pellegrini aprovecharon la ventaja y golearon al West Brom.
Con la necesidad de ganar para seguir cerca de Chelsea y no perder el segundo lugar en la Premier League, el Manchester City recibió a Albion en el Etihad Stadium. El equipo local, muy criticado después de la eliminación europea contra el FC Barcelona, arrancó el partido de gran manera, y apenas al 2', llegó al área rival para generar peligro y lograr la expulsión de un rival, que como último recurso derribó a Wilfried Bony en la entrada del rectángulo.
Indudablemente, el encuentro cambió totalmente luego de la acción, con unos Baggies que desde el principio se limitaron a defender, y con un Man City dueño del juego pese a no poder hacer efectiva la superioridad numérica debido a las enormes atajadas del portero Boaz Myhill, quien, al final del duelo, terminó siendo el responsable de que el marcador no fuera más abultado, atajándole a Sergio Agüero en varias ocasiones.
Fue así como de esta forma se mantuvo el 1-0 parcial hasta el minuto 27, cuando Bony ganó bien el balón tras una serie de rechazos y puso el primero en su cuenta personal con el club celeste. Poco más tarde, Fernando Reges hizo lo propio aprovechando otro error de la zaga visitante para meter el segundo justo antes del descanso.
La parte complementaria comenzó con un City que buscó liquidar el compromiso lo antes posible, pero fue el West Bromwich Albion que, por medio de Saido Berahino, pudo poner el 2-1 de no ser por el travesaño. Sin embargo, finalmente los de Pellegrini acabaron imponiendo su factor numérico en un disparo de Stevan Jovetić que David Silva desvió lo justo para hacer el 3-0 definitivo y lograr un resultado que les permite presionar un poco más en la zona alta de la tabla.
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